Ha concluido VIII cumbre de las Américas que tuvo como telón de fondo la “Gobernabilidad Democrática frente a la corrupción”, esta cita de mandatarios americanos no pudo tener como mejor escenario al Perú que en estos últimos tiempos se viene consolidando como uno de los países más corruptos del continente.  

La corrupción en el país está muy evidenciada desde los vlavideos hasta los mamanivideo y todo el proceso de la CIA Fujimori. Sino no lo crees, durante el año judicial anterior se procesaron 13 mil casos con sentencia firme por corrupción, de ellos el más frecuente es cohecho, en sus modalidades de soborno con 7, 272 sentencias condenatorias; colusión, con 3, 791 sentencias; malversación de fondos, con 2, 745; peculado, con 2, 658; y concusión, con 959 sentencias. Al que habría que agregar 12.848 casos que están en la fase de diligencias preliminares y 5.162 casos que se encuentran en la investigación preparatoria formalizada.

En un reciente informe de la Defensoría del Pueblo reveló que este flagelo le cuesta al país 12,000 millones de soles cada año o lo que equivale a más de 3.600 millones dólares. Divido por días equivale 10 millones dólares por día.  SegúnTransparencia Internacional, nuestro país ocupa el puesto 96 de 180 de países en el ránking mundial en la percepción de la corrupción y en américa latina es uno de los más corruptos luego de Venezuela, Brasil.  Para que usted tome en cuenta  por contraste, Canadá obtiene la mejor ubicación (82 puntos de 100) que sería el país más limpio en corrupción a este lado del continente.

La Cumbres de las Américas acabó con el “Compromiso de Lima” un documento de 57 puntos que intenta hacer frente a este flagelo. Algunas recomendación del documento expresa la necesidad de impulsar la adopción y/o fortalecimiento de las medidas legislativas que sean necesarias para tipificar penalmente los actos de corrupción, como también promover el uso de sistemas electrónicos para compras gubernamentales, contrataciones de servicios y obras públicas para asegurar la transparencia. Consolidar la autonomía e independencia de los órganos de control superior. Proteger a los denunciantes, testigos e informantes de actos de corrupción frente a acciones intimidatorias y represalias. Proteger el trabajo de los periodistas y personas que investigan casos de corrupción. Proteger a los servidores públicos involucrados en hacer cumplir la ley, la investigación, el enjuiciamiento y la sanción de los actos.

Estas medidas ya están  camino. Solamente habrá una lucha frontal  contra la corrupción cuando exista una auténtica libertad de expresión, cuando exista la conciencia de la transparencia en todos los procesos políticos e instituciones democráticas y cuando los medios de comunicación masiva no jueguen sus intereses. Sólo así será posible combatir.